Reloj no marques las horas, porque voy a enloquecer, ella se irá para siempre, cuando amanezca otra vez, reloj ….
Un bolero, una canción, un reloj que marca las horas, la desazón y la ilusión. El tiempo como brazo ejecutor; de los plazos, los caminos, del hola y del adiós. El tiempo que no se detiene, que nunca se queda, qué no se define.
Horas, minutos y segundos. Un tic tac, un desayuno. Una noche de pasión. El que sube y el que baja. El que no entiende de entreplantas. El si y el no. La margarita que se marchitó. El fuego que se encendió.
Hoy me paro. Sigo y pienso. Continúo, me estremezco. ¿Dónde estás? ¿Dónde te has ido? ¿Serás el tiempo perdido?
Una isla. Tu y yo. Sin agudos, sin fisuras. El sol que nunca se pone, el mar que nunca descansa, la arena que no quema, el sueño que nunca llega.
No me duermo, no me canso, no te dibujo, ni siquiera te imagino, simplemente sigo mi camino. Sé a dónde voy, sé lo que quiero. Una sonrisa, una maleta, volver a ninguna parte. El reto está por llegar, el desafío simplemente es despertar.
Abro los ojos, desenvaino mis sentidos, no solo te veo, además, te miro. No te tengo miedo, sé que estás, sé quién eres y que es lo que vienes a buscar.
Horas, minutos y segundos. Sigo y pienso. ¿Alguna vez te detendrás?
No te pares, no me dejes. Prefiero tenerte a perderte. Si tu estás sé que la música no dejará de sonar. El titanic, un icerberg, el agua helada y el final, pero mientras todo fluya, aquí o en el más allá, mientras haya tiempo, nunca dejaré de soñar.
Y por eso te quiero. Por eso me aferro a ti. Solo tú me haces sentir que nada es imposible y que todo es relativo. Mueves mi mundo. Me lo das y me lo quitas. Me cautivas y te vas.
Reloj no marques las horas, porque voy a enloquecer …
Te escapas de mis manos. El tiempo y yo. Platero y tú. Las nanas de la cebolla, una guerra, una historia.
Eres mío, te diluyes, lo que es ya no existe. Lo borras. Solo puedo recordar. Caprichoso, adolescente, por favor, ¿te puedes quedar?
¿Cómo retener un minuto? ¿Cómo parar el tic tac? Solamente una memoria y algo para recordar.
El tiempo …
El cajón desastre de una profe de universidad 